Elkín superó sus obstáculos y se coronó como medallista de plata en el maratón, categoría T12 para deficientes visuales, en los Juegos Paralímpicos, en Pekín 2008.
Con constancia y tenacidad, vence los obstáculos, aún si son pequeños, gracias a su constancia y esfuerzo. Elkin quiere seguir corriendo y ganar premios, por lo que entrena cuatro horas diarias.