En sus 18 ediciones, EL COLOMBIANO Ejemplar ha contado con diversidad de miradas en su juzgamiento. Un recorrido por los jurados, esos que han descubierto seres ejemplares.
La misma emoción que sentía la filósofa Martha Elena Bravo cuando a sus manosllegaban las postulaciones de personajes de la talla de la pianista Teresita Gómez o la artista Débora Arango se replicaba al estudiar los perfiles de personajes anónimos cuyas historias cargadas de valor, arrojo y empuje eran protagonizadas en rincones alejados del territorio colombiano.
Su misión no era sencilla, pero sí muy gratificante. Tal fue su sorpresa cuando el periódico la convocó para que fuese jurado de EL COLOMBIANO Ejemplar que se cuestionó varias veces, incluso estando ya en el grupo que seleccionaba a los ganadores, si ella era la persona indicada, “habiendo tanta gente importante en el país que lo podía hacer”.
Estar al lado de personajes de la talla del expresidente Belisario Betancur –quien presidió el jurado hasta su muerte en 2018– le daba a su rol una dimensión que para ella era complaciente y retadora.
Bravo hace parte de una lista que desde 1999, cuando se entregó la primera edición del premio, han engrosado, además de Betancur, personalidades como el exrector de la Universidad Eafit y exministro de Cultura, Juan Luis Mejía; el entrenador de fútbol, Francisco Maturana; el expresidente de la Andi, Luis Carlos Villegas; el activista Juan Mayr Maldonado; el vicerrector académico de la Universidad Central, Fernando Chaparro; la filósofa y exprimera dama, Lina Moreno; el empresario y expresidente de Promigás, Antonio Celia; el expresidente del Comité Olímpico, Andrés Botero, y el viceministro de Medio Ambiente, Ricardo José Lozano.
Cualificado y garante
Para el exrector Juan Luis Mejía, actual miembro del jurado, que este lo hayan compuesto en su historia nombres con variedad de enfoques y miradas es un signo de garantía y de transparencia en la elección. “Me parece importante la independencia que hemos tenido frente a la opinión del periódico para tomar las decisiones de los ganadores”, afirma.
Mejía lamenta que este año, por primera vez desde que fue institucionalizado el evento, no vaya a estar presente el expresidente Betancur, y recuerda el entusiasmo que mostraba cuando participaba en las deliberaciones. “Nos acompañó como presidente del jurado hasta que nos reunimos por última vez en la edición anterior. Ese día ingresó a la clínica y no salió”.
El exrector considera clave el rol que el jurado cumple ya que les permite hacer visibles las vidas de personas “absolutamente anónimas” de todas las regiones del país, quienes sin esperar ninguna retribución se convierten, con su acción, en ejemplo para los demás sin importar el ámbito en que se desenvuelva.
Fernando Chaparro, vicerrector académico de la Universidad Central, y también miembro actual del jurado, celebra que a través de su participación se puedan seleccionar colombianos “normales, de la calle”, a grupos de ciudadanos, iniciativas o comunidades que “de otra forma no se les reconocería”. Por eso, cuando EL COLOMBIANO lo invitó a integrarse al grupo que juzga las postulaciones, le resultó una tarea “apasionante” y retadora.
Uno de los días más felices en su agenda es cuando separa la jornada para revisar las postulaciones y decantar sus opcionados finales. “Es interesante leer los casos que llegan al jurado para identificar y destacar experiencias en campos como la ciencia o la gestión ambiental e igualmente aquellas personas e instituciones que se organizan en comunidades urbanas y rurales, se empoderan y buscan la solución a los problemas que deben afrontar a diario sin
sentarse a esperar que alguien o el Gobierno se encargue; le dan la bienvenida al apoyo pero tienen iniciativa y generan ideas innovadoras que llevan a la práctica”, sostiene Chaparro.
Gente muy valiosa
Martha Elena Bravo valora el hecho de que la sociedad colombiana necesita tener referentes como los que surgen de EL COLOMBIANO Ejemplar, “personas que nos sirvan de guía para mirar, emular y actuar como ellas”, incluso aquellas que lideran acciones en situaciones tan difíciles y adversas que pese a ello tienen la capacidad de convocar a las comunidades entorno a todo tipo de proyectos, culturales, artísticos o académicos.
“La sociedad necesita líderes para estar cohesionada, y en EL COLOMBIANO Ejemplar no hay un patrón único, hay gente humilde y gente reconocida, pero todos se ponen la camiseta por su región, su localidad o el país en general”, concluye Bravo.
Doble reconocimiento
El expresidente Belisario Betancur recibió EL COLOMBIANO Ejemplar en 2019 de manera póstuma. Es de los pocos que han sido jurados y han recibido el premio. Durante todas las ediciones de este galardón estuvo liderando esa búsqueda de colombianos ejemplares. Dejó como legado su compromiso y sabiduría, y el orgullo que sentía por elegirlos: fueron 19 años como presidente del jurado.
Andrés Botero, expresidente del Comité Olímpico Colombiano, también ha sido parte del jurado y recibió este reconocimiento. Lo obtuvo en 2012, en la categoría Deporte-Persona, en un año clave para el país en este campo, ya que se había obtenido en Londres la que hasta ese momento era la mejor participación en la historia de los Juegos Olímpicos –luego se superó en Río 2016–, con una medalla de oro, tres de plata y cuatro de bronce.
De su rol en el jurado recuerda la oportunidad de compartir con personajes del calibre de Belisario Betancur, lo cual sumó motivos para sentirse orgulloso de que hubieran contado con él para la selección de los ganadores.
El jurado 2021
- Antonio Celia, empresario y expresidente de Promigás.
- Fernando Chaparro, vicerrector académico de la Universidad Central.
- Ricardo José Lozano, exministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible.
- Juan Luis Mejía, exrector de la Universidad Eafit.
- Lina Moreno de Uribe, filósofa y exprimera dama de Colombia.
- Jorge Mario Velásquez, presidente del Grupo Argos.
“Los jurados estamos comprometidos, compartimos la filosofía del premio y comprendemos bien su naturaleza y propósito para aportar a las interesantes discusiones que tenemos al analizar cada postulación”:
Fernando Chaparro, vicerrector académico de la Universidad Central de Colombia.
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