Institución ejemplar: Ciencia y Tecnología
Los más tesos del plástico y del caucho
Con una trayectoria de 22 años en la academia, y con un vínculo muy estrecho con las empresas, el Instituto de Capacitación e Investigación del Plástico y del Caucho, es hoy líder en investigación y sus proyectos de plástico le han dado la vuelta al mundo. Para su directora, María del Pilar Noriega, los triunfos silenciosos que han tenido demuestran que no solo “investigar vale la pena” sino que el trabajo en equipo y la constancia tienen sus frutos en resultados comerciales y académicos que se ven reflejado en su producción bibliográfica. En el corazón de esta empresa, que tiene como socios fundadores a Acoplásticos, la Universidad Eafit y Formacol y con el apoyo de Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional, lograron, por ejemplo, la patente del dispositivo de sujeción de cables o alambres aéreos para ayudar a desviar el vuelo de las aves. Con la premisa que hay que sumar investigación más desarrollo más innovación, han desarrollado en sus laboratorios los cajeros de los bancos, los tanques de gasolina de los carros, las luminarias públicas, los desviadores de vuelo.
“Tenemos la misión de convertir conocimiento en riqueza y tener una presencia nacional e internacional. Frente a esto, tenemos claro que la vedette del Instituto es la investigación. Somos un ejemplo de cómo es la relación ideal entre empresa y academia”, explicó Noriega. En ese orden, en la sede del Instituto, que funciona en la Universidad Eafit y que tiene dos edificios donde se encuentran los laboratorios especializados, aulas de clases y oficinas, y en la que trabajan 33 personas entre doctores, máster, técnicos y pasantes, el 78 por ciento de lo que hacen es investigación en sectores como el de autos, energía, salud, empaques. Y aunque el mercado es competitivo, hoy exportan sus servicios a Estados Unidos, México, Guatemala, Honduras, Venezuela, Costa Rica, Chile y Perú. Noriega destacó que desde sus inicios el Instituto tiene un vínculo estrecho con las empresas del sector, sin embargo, son una unidad académica porque tienen especialización, maestría y doctorado con Eafit, pero siempre vinculado con el desarrollo para las empresas.
“El Instituto y las actividades que se desarrollan en él, investigación y desarrollo, generación de conocimiento, innovación, formación de estudiantes de posgrado y de investigadores jóvenes… se convirtieron en mi pasión. La pasión es la llama que me permite trabajar cuando otros descansan y disfrutar mientras lo hago”, dijo Noriega quien sostuvo que ha estado allí desde su creación lo que le ha permitido conocer el mundo, grandes maestros y muchos amigos. En la actualidad, y según Noriega, el Instituto atiende las necesidades de 1.250 empresas de los más diversos sectores de la economía. La estructura de los servicios tecnológicos prestados por el ICIPC a las empresas hace parte del proyecto IDD (Investigación, Desarrollo y Diseño) que representa el 67% del portafolio del Instituto, seguido por las pruebas de laboratorio especializadas con un 12% y la capacitación formal (especialización y maestría, en asocio con Eafit) y no formal con un 10 %.